La ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos de Tokio, programada para julio, podría convertirse en foco de infección del coronavirus.
Sin embargo, si se tomaran medidas exhaustivas de prevención, el riesgo de propagación del virus se reduciría en un 99 %, según una proyección realizada por un equipo de científicos.
La simulación se modeló a partir de la presencia de 60.000 personas en el Estadio Nacional durante cinco horas.
Si entraran al estadio seis personas infectadas asintomáticas, el número de nuevos casos de infección aumentaría en 9,6 si no se tomaran medidas de prevención.
En cambio, si los espectadores cumplieran con las reglas de seguridad sanitaria, el número de nuevos casos sería de 0,064, informa Yomiuri Shimbun.
Entre las medidas de prevención figuran el uso de mascarillas, evitar las aglomeraciones al entrar y salir del recinto, y consumir alimentos y bebidas en sus asientos (equipados con tabiques), entre otras.
El equipo que realizó el estudio está formado por investigadores de la Universidad de Tokio y la Universidad Médica de Fukushima, entre otras instituciones. (International Press)
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