Noriyuki Suzuki perdió a su hija Mai, una niña de 12 años, en el tsunami que devastó a la región de Tohoku el 11 de marzo de 2011.
Nueve años después de la catástrofe, Suzuki será una de las miles de personas en Japón que portarán la antorcha de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.
El hombre de 54 años correrá en recuerdo de su hija.
«Espero que los espíritus de todos los niños que murieron, no solo el de Mai, se unan a mí cuando corra», dice Suzuki a Mainichi Shimbun.
El padre de Mai llevará una insignia de la escuela de la niña en el pecho.
74 niños y 10 profesores y trabajadores del colegio, situado en la ciudad de Ishinomaki, prefectura de Miyagi, murieron o desaparecieron por el tsunami.
El otro objetivo de Suzuki es compartir con el mundo las lecciones que dejó el tsunami en la escuela. Las víctimas se quedaron en el colegio hasta 50 minutos después de que se produjo el terremoto, y fueron arrastradas por las aguas cuando recién había comenzado la evacación.
Alrededor de 10.000 personas portarán la antorcha olímpica en las 47 prefecturas japonesas. El recorrido se iniciará el 26 de marzo en Fukushima y durará 121 días. (International Press)
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