El 21 de mayo de 2016, la aidoru Mayu Tomita fue apuñalada por un fan en una calle en Tokio antes de un concierto.
El agresor la acuchilló numerosas veces en varias partes del cuerpo, entre ellas el pecho y la cabeza. Aunque la cantante sobrevivió, recién al mes siguiente recuperó la conciencia.
El atacante, un hombre llamado Tomohiro Iwazaki, fue condenado a 14 años y seis meses de prisión por intento de asesinato en 2017.
Mayu, hoy retirada de la industria del entretenimiento, ha presentado en el Tribunal de Distrito de Tokio una demanda en busca de una compensación por daños y perjuicios de 76 millones de yenes (700.000 dólares) por parte de Iwazaki, la policía de Tokio y su agencia.
La víctima acusa a la policía de Tokio de negligencia.
Antes del ataque, Mayu acudió varias veces a la policía para denunciar que Iwazaki la acosaba a través de las redes sociales. Los agentes, sin embargo, no emitieron una advertencia contra el hombre.
El día del ataque, justo antes de ser acuchillada, Mayu llamó a la policía en busca de ayuda, pero los agentes se equivocaron y en vez de ir al lugar de la agresión fueron a la casa de la artista. El error fue del agente que recibió la llamada.
La policía tokiota, según Tokyo Reporter, admitió ser “muy consciente” de que la víctima buscó su ayuda y que no pudo evitar el ataque. «Estamos trabajando en equipo para prevenir una repetición”, dijo.
La agencia también ha sido demandada por no garantizar la seguridad de la artista de 23 años. (International Press)
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