El 19 de diciembre de 2013, Takayuki Ohigashi, presidente de una popular cadena de restaurantes de gyoza, fue encontrado sangrando e inconsciente en un estacionamiento frente a la sede de su compañía en Kioto.
Había recibido varios disparos.
El hombre de 72 años fue llevado a un hospital, donde murió. En la escena de los hechos se hallaron cartuchos.
Cinco años después del crimen, la policía de Kioto está solicitando la ayuda del público en busca de información que conduzca a resolver el caso, informó Japan Today.
Ohigashi dirigía la cadena Gyoza no Ohsho (Rey de Gyoza), que opera más de 650 restaurantes en todo Japón. También tiene locales en el extranjero.
La víctima era un conocido hombre de negocios.
El miércoles por la mañana, los empleados de la compañía colocaron flores en la escena del asesinato.
Los medios en Japón especulan que el crimen habría sido perpetrado por una organización yakuza.
La policía de Kioto ha visitado 5.800 hogares en la zona del crimen en busca de información y hablado con 1.900 personas relacionadas con la empresa del hombre, según Tokyo Reporter.
Basándose en las imágenes de una cámara de seguridad, el autor probablemente iba en una motocicleta. A aproximadamente 1,5 kilómetros de la escena del crimen se encontró una moto, que había sido robada, con rastros de pólvora en el manubrio.
La compañía asegura que no tiene vínculos con el crimen organizado. (International Press)
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