Conocido como el “super voluntario” por los medios japoneses por su extraordinaria labor como voluntario en zonas de desastre o en todo aquel sitio donde se necesita gente que ayude, Obata estuvo el domingo en la prefectura de Hiroshima, que el mes pasado fue devastada por unas inundaciones causadas por torrenciales lluvias.
Ni bien encontró al niño de Yamaguchi, salvándole la vida, el hombre de 78 años viajó a la ciudad de Kure llevando en su coche un montón de comida, agua y otros productos para las víctimas del desastre, revela Japan Today.
Además, Obata trabajó removiendo la tierra, la arena y los desechos que invadieron las casas de la ciudad tras los aludes.
Pese a que ya no es una persona joven y el calor, el voluntario no bajó los brazos y se mantuvo a la par que otros voluntarios.
Kure fue una de las zonas más afectadas por las inundaciones en Hiroshima.
Esta es la segunda vez que Obata se presenta como voluntario en Kure. La primera vez permaneció tres semanas después de las inundaciones. Su larga experiencia como voluntario fue importante para hacer más eficientes los trabajos.
«Me sentí muy feliz cuando me dijeron ‘Bienvenido de nuevo’. Sin embargo, el trabajo no ha progresado mucho desde la última vez que estuve aquí. Todo lo que quiero es que el área se recupere rápidamente», dijo.
Obata ya es una celebridad. Muchos voluntarios lo reconocieron y se acercaron a él para tomarse fotos.
El super voluntario continuará con su trabajo voluntario en Kure hasta finales de agosto. Mientras tanto, dormirá todas las noches en su coche. (International Press)
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