El padre de Wei Qiujie, la joven china cuyo cuerpo fue hallado en una playa en la ciudad de Kushiro, prefectura de Hokkaido, arribó el jueves en la noche a Japón.
En declaraciones que recoge Tokyo Reporter, el hombre dijo que sentía una “extrema tristeza”.
El acongojado padre recordó que su hija esperaba con ansias su viaje a Japón. Jamás imaginó que terminaría así, añadió.
La profesora de 26 años arribó a Hokkaido el 18 de julio y su retorno a China estaba previsto para el 25. La última imagen viva de ella fue registrada el día 23 en una tienda de artículos budistas en Kushiro.
El cuerpo fue encontrado por un pescador el último domingo. La turista murió ahogada, según la policía, que cree que la mujer se suicidó.
En la habitación del hospedaje que la albergaba se encontró una carta en la que agradecía a sus padres y se despedía de ellos. El mensaje sorprendió a su familia, que antes de su viaje no notó nada extraño en ella. La profesora, según sus parientes, amaba su trabajo y no tenía problemas económicos. (International Press)
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