Antonio Inoki emigró con su familia a Brasil en 1957
El exluchador japonés Antonio Inoki, miembro del nacionalista Partido por la Restauración de Japón, inauguró el lunes una organización no gubernamental (ONG) en Corea del Norte cuyo objetivo será el de «contribuir a la paz» a través del deporte.
«Me siento muy emocionado ya que he logrado algo que tenía en mente desde hace muchos años», manifestó Inoki, de 70 años, en declaraciones en Pyongyang a la agencia nipona Kyodo.
El exluchador, que emigró a Brasil en 1957 con su familia tras la II Guerra Mundial, llegó a Pyongyang el sábado para una visita de seis días, en el que supone su vigésimo séptimo viaje al hermético régimen comunista, algo muy inusual al ser un país cuyo acceso está muy restringido y que no mantiene relaciones diplomáticas con Japón.
«Me gustaría contribuir a la paz a través del deporte y promover la importancia de esto en Japón, donde espero conseguir apoyos para ello», añadió el parlamentario nipón, que inauguró la sede de la ONG junto con Ma Chol Su, exresponsable de la zona Asia del Ministerio norcoreano de Asuntos Exteriores.
Inoki y Ma, que actualmente es el máximo responsable de una asociación de amistad entre ambos países, descubrieron una placa para dar inaugurada la actividad de la oficina, en la que todo el personal estará formado por ciudadanos del Norte.
El político viajó a Corea del Norte sin la autorización necesaria que expide la Dieta (Parlamento) para viajes al extranjero durante el periodo de sesiones parlamentarias, con lo que ahora se puede enfrentar a sanciones a su regreso a Japón, que denegó su salida al no quedar claro el propósito de su visita.
La última vez que el exluchador visitó Corea del Norte fue a finales de julio, antes de asumir oficialmente su cargo como legislador en Japón, para asistir a la celebración del 60 aniversario del armisticio con el que culminó la Guerra de Corea (1950-1953).
El afamado luchador entró en política en 1989 cuando se convirtió en senador para el extinto Partido de Deporte y Paz, antes de formar parte del populista Partido por la Restauración de Japón, liderado por los polémicos Shintaro Ishihara, exgobernador de Tokio, y Toru Hashimoto, alcalde de Osaka.
Inoki, de gran corpulencia con cerca de 1,90 metros de altura y más de 100 kilos de peso, participó también en las negociaciones para la liberación en 1990 de rehenes japoneses en Irak durante la Guerra del Golfo, y se ha presentado siempre como negociador para resolver los asuntos de fricción entre Japón y el Norte. (EFE)
