El 6 de julio del año pasado, Hiroaki Hashimoto, un hombre de 42 años, estranguló a su exprofesora de ballet hasta hacerle perder el conocimiento y, acto seguido, le cercenó el pulgar de la mano derecha con un martillo y un cincel.
El mismo Hashimoto llamó a la policía para confesar el ataque, que tuvo lugar en un estudio de ballet en Tokio.
El Tribunal de Distrito de Tokio sentenció a cuatro años y medio de prisión al sujeto, informó la agencia Kyodo.
El hombre declaró durante el juicio que estaba enojado con su exprofesora porque ella lo había tratado de una manera “grosera”. Cuando fue arrestado, Hashimoto dijo que la mujer había impedido que continuara asistiendo a clases.
Los jueces hicieron hincapié en la premeditación del ataque, pues el hombre preparó de antemano los instrumentos con los que mutiló a la víctima, una joven veinteañera.
La fiscalía había solicitado seis años de prisión. (International Press)
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