Un grave descuido que le costó la vida a un niño de diez años.
La víctima se colgó de las redes del travesaño de un arco de fútbol en una escuela de primaria en la prefectura de Fukuoka, cuando de pronto los postes se desprendieron del suelo, la portería se vino abajo y cayó sobre el pequeño.
El arco de dos metros de altura y tres de ancho no estaba correctamente asegurado al suelo, detalló Tokyo Reporter.
El niño, que jugaba de arquero y se llamaba Haruto Umezaki, fue llevado a un hospital, donde murió cuatro horas después.
El presidente de la junta educativa local, Tetsuya Kii, calificó la tragedia como “enormemente lamentable” y atribuyó el incidente a una deficiencia de la escuela, razón por la cual -dijo- son necesarias las inspecciones de seguridad.
Los arcos deben ser revisados cada mes, pero la portería que causó la muerte de Haruto fue inspeccionada por última vez en octubre pasado. (International Press)
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